En el día de su posesión como presidente reelecto, Daniel Noboa dejó pendiente la designación de su Gabinete ministerial. Era el último punto de su agenda programada en la serie de actividades que cumplió al asumir el mando del país para los próximos cuatro años. La prensa fue convocada para que siga el protocolo previsto, pero unos 30 minutos antes funcionarios de la secretaría de Comunicación informaron que la actividad se postergaba debido a que la agenda con los invitados extranjeros se había extendido.
Los decretos que se emitieron fueron para ratificar a Stalin Andino González como Secretario General Jurídico de la Presidencia de la República; y a Cynthia Gellibert Mora como Secretaria General de la Administración Pública y Gabinete de la Presidencia de la República.
Además, le asignó a su vicepresidenta las funciones que deberá cumplir como parte del Gobierno. María José Pinto estará a cargo de la articulación de políticas públicas integrales, planes, programas, proyectos y actividades vinculadas a: salud mental; educación intercultural bilingüe; embarazo adolescente; primera infancia; y, desnutrición crónica infantil.
Sus primeras actividades
Noboa inició la jornada en la Cima de la Libertad donde participó de la conmemoración de los 203 años de la Batalla de Pichincha. “El eco de valor, dignidad y libertad resuena en nuestro corazón al conmemorar un año más de la Batalla de Pichincha, gesta gloriosa que selló nuestra independencia”, afirmó el Primer Mandatario durante su discurso. Resaltó la labor de las Fuerzas Armadas al cuidar las fronteras, al construir la paz en los barrios, al atender emergencias en desastres naturales, en la construcción de infraestructura, en la atención médica en zonas remotas y en actuar como actores del desarrollo social. “El país entero respalda su trabajo y, con su apoyo, seguiremos consolidando las bases de este nuevo Ecuador que ya ha perdido el miedo y que abraza a la esperanza”, indicó.
Luego colocó una ofrenda floral en el mausoleo del Mariscal Antonio José de Sucre y tuvo su encuentro con la ciudadanía que se dio cita en los exterios del Palacio de Carondelet. “Esa es la forma en la que nosotros debemos gobernar: junto al pueblo, pero dándole dignidad, progreso y paz a los que fueron olvidados en los últimos gobiernos”, manifestó.
El momento de la posesión
El acto central y principal de este día se cumplió en la Asamblea donde Noboa fue posesionado como presidente de la República, hizo el juramento de rigor y recibió la banda presidencial. Ante delegaciones nacionales e internacionales señaló que serán cuatro años de progreso, diálogo, transparencia, estabilidad y oportunidades.
«Encarnamos una nueva forma de liderazgo, de hacer las cosas diferentes, de golpear mil veces con tal de lograr nuestros objetivos. No creemos en la comodidad, no venimos a heredar moldes viejos ni a maquillar errores. Venimos a romper ciclos, a hablar claro, a decir lo que nadie se atrevió”, aseguró en su discurso de 21 minutos.
El primer mandato advirtió que en su primer mandato enfrentó adversidades, que recibió un país saqueado, corrompido y secuestrado. “Esta guerra por el alma del país es nuestra. En este espacio quiero reconocer su compromiso con la honestidad, el trabajo duro y su generosidad. Esta victoria es del pueblo, porque son parte de este proyecto. Ustedes son mi fuerza y mi motor”, manifestó.